Soñaba con ser aprendiz de sabio, héroe de una gran hazaña o alquimista de palabras. También contemplaba la idea de tener siempre la ilusión del ingenuo y la virtud del justo, pero no ser nunca la flor de un día. Así fue como el alma de un hombre noble descubrió en poco tiempo cómo podía hacerse invisible en los mundos que no existen.
Mabel
¡Excelente! Un abrazo Rafa y mi voto desde Andalucía