Convencido de que nunca le creerían, no había compartido con nadie que sabía volar. Solamente lo hacía cuando era absolutamente necesario y cuando lo hacía, volaba alto, muy alto, para que lo confundieran con un ave y no lo descubrieran. Hoy, cuando trató de regresar a su casa, había llovido mucho y el camino estaba inundado y los niveles de la crecida seguían subiendo. No tuvo otro remedio. Ahora que ya estaba oscureciendo tendría que descender a escondidas para que nadie lo viera.
A la altura y velocidad que volaba no iba a poder descender como lo había deseado y temía quedarse enredado en los cables del tendido electrico. Se fijó en el terreno frente a él, escogió un punto vertical a su línea de visión y comenzó a analizar cuán rápido descendía. El punto de referencia que había escogido se movía hacia abajo lo que significaba que le pasaría por encima y si no hacía algo pronto iba a pasar sobre los cables del tendido eléctrico. Prefería descender antes de llegar a los cables del tendido eléctrico porque sabía que eran cables de alta tensión.
Para evitar los cables tendría que maniobrar su descenso girando en espiral hacia la izquierda pero le asustaba pensar que podría caer sobre los alambres de púa que cercaban la finca que comenzaba a pasar bajo sus pies. La otra opción era girar hacia la derecha y continuar su descenso paralelo a los cables de alta tensión y descender en la carretera, pero como ya estaba oscureciendo, probablemente los conductores no lo verían a tiempo y lo iban a arrollar y si no lo arrollaban, todos lo verían y descubrirían su secreto.
Buscó desesperadamente un pedazo de tierra en su línea de visión donde tocar suelo sin tener que volar sobre los cables del tendido eléctrico. Cuando descubrió un pequeño lugar que ofrecía una buena opción comenzó a rogar desesperadamente que el viento no cambiara de dirección.
Contemplar el barrio al sobrevolar las casas de los vecinos le encantaba. A la altura en que volaba podía distinguir el pueblo, las pequeñas casitas, los caminos, y las fincas.
Comenzó a descender. A vuelo de pájaro, podía divisar los techos de las casas del vecindario y si no se daba prisa, pronto tendría que doblar las piernas para esquivarlos. Podía distinguir algunos de los vecinos que iban y venían ocupados en sus quehaceres y de repente vio a su madre allá abajo, en el patio de atrás de la casa, menudita y descalza, tendiendo la ropa que recién había terminado de lavar. Le dio mucha tristeza verla caminar descalza sobre el suelo mojado y frio y pensó gritarle que se pusiera sus zapatos pero no quería asustarla, además de que nunca le había comunicado que sabía volar. Se inclinó un poco a la izquierda y modificó la dirección en que descendía para que ella no lo viera.
De repente sintió un cambio en la dirección del viento que lo empujaba hacia los cables del tendido eléctrico. Los nervios comenzaron a apoderarse de él. Sintió desespero, miedo y dificultad para respirar. El corazón comenzó a acelerársele por la sensación de que caía. En un momento sintió que se quedaba sin aire al ver la velocidad con respecto al suelo que se acercaba vertiginosamente y despertó sobresaltado, bañado en sudor y aferrándose a sus sábanas.
Estela Rubio
A veces, los sueños pueden ser terribles, y nos alegramos de que sean sueños.
Saludos José Rubén y mi voto.
Estela
Mabel
¡Qué pesadilla! Un abrazo José Rubén y mi voto desde Andalucía
JR
Y que bueno es poder despertar y darse cuenta que fue solo una pesadilla! Gracias Estela, un abrazo!
JR
Muchas gracias, Mabel! Saludos!
ginimar de letras
A mí tampoco me creyeron cuando conté que sabía volar. Me transformé en pájaro y sobrevolé la ciudad. Pero era pequeña e insisten en que solo fue un sueño. Yo no estoy tan segura… Hermoso sueño. Tan solo necesitas practicar un poco el aterrizaje. Un abrazo 🙂
JR
@ginimardeletras – ginimar, siempre pensé que era el unico, jajaja! Que bueno que tenemos un secreto comun.
Saludos y muchas gracias por tu apoyo.
Klodo
Buen relato JR
Narraste tan bien el sueño que, egoístamente, hubiese deseado
que tu vuelo durara mucho tiempo más.
Nos brindaste un juego de imaginación excelente, en tu estilo.
Mis saludos de amigo
Sergio
JR
@sergiorodriguez – Sergio, que gusto saludarte despues de haber estado alejado por unos dias! Muchas gracias por tu comentario y tu apoyo de siempre. Me alegra mucho que te haya gustado mi historia.
Gian
Me gustó el relato. Te has ganado un seguidor. Saludos y mi voto.
The geezer
Una fantasía o sueño que yo creo que casi todos tenemos algunas veces…enhorabuena por describirlo tan bien! Saludos. César
JR
@gian – gian, muchas gracias! Me alegra mucho que te haya gustado. Nos seguimos leyendo. Saludos!
JR
@cesarholgado – Cesar, es un gran honor recibir tus comentarios. Muchas gracias! Saludos!
gonzalez
Me gustó mucho, JR. Te dejo mi voto y un fuerte abrazo.
JR
@gilgonzalez – gonzalez, muchas gracias por tu apoyo y por leerme. Muy agradecido. Me alegro mucho que te haya gustado.