Muere el silencio
de la espiga mecida por el viento,
de la rama que se estira en el abeto,
de la hierba nueva que germina.
Muere el silencio
de la siesta del gato en la caseta,
de la abeja que se adentra bajo tierra,
del ratón que se esconde en un tocón.
Muere y con ello muere la creación,
la semilla del pensamiento,
la posibilidad de crecer
y mejorar el cuento.
Mabel
Muy buen poema. Un abrazo Ginimar y mi voto desde Andalucía
Esruza
A veces me asombras con tus poemas, Ginimar. Es hermoso.
Mi voto y un saludo cordial
Estela
Laura C.
Lo que nunca muere es tu inspiración.
Bellísimo, como siempre.
Un abrazo.
ginimar de letras
Muchas gracias Mabel, Estela y Laura por vuestros generosos comentarios. Un abrazo 🙂
Marta Izbar
Muy bonito ! Me quedo ante todo con los últimos 4 versos !
ginimar de letras
Muchas gracias Marta. Un abrazo 🙂